En Bélgica,
solo hay pequeñas colinas, eso si,
tapizadas de arboles.
me encanta ver sus verdes mareas
y sentir su sempiterna lluvia.
Sin embargo, no es lo mismo.
A mi, me gusta levantar la mirada y
toparme con imponentes murallas pétreas
que parezcan alcanzar alguna que otra nube cabizbaja.
extraño los cielos azulísimos,
que sin pudor, se muestran desnudos
extraño la magia del desierto,
que duerme bajo el sol y despierta con el mágico
sortilegio de la lluvia
La lluvia me reconcilia con todo,
me encanta porque barre con
olores, vándalos y tristezas.
La lluvia canta con un redoble de tambor,
compuesto por miríadas de gotas saltimbanquis
que al reflejo del sol,
muestran sus paracaídas de tela multicolor.
Solamente hay algo mas lindo:
lluvia con montañas.
- Javi, el Bardo de louvaina-la-nueva
tzzzz este dia andabas nostalgico , y sip yo por el contrario estoy hasta la madre de no poder ver el horizonte :|
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